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ASESORAMIENTO LEGAL
A pesar de que la tecnología y el internet parecieran haber sido la solución para reducir, si no eliminar, la tediosa burocracia de los diferentes trámites administrativos que se requieren en el diario vivir de las personas. Sin duda alguna, hoy puedo afirmar que el “relacionamiento humano”, no solo no ha perdido su valor frente a las “maquinas”, sino, se hace evidente que hoy más que nunca, es una necesidad imperiosa a la hora de ganarle terreno a la burocracia administrativa.
Tramitar Visa para acceder a ciertos países en el mundo, es de por si complicado, más aun para quienes desean visitar un país del llamado Primer Mundo y proceden de otro conocido como del Tercer Mundo. Situación hasta cierto punto comprensible, si se visualiza desde el punto de vista del enorme problema migratorio ilegal, que precisamente sucede en ese sentido.
Contrariamente, a la percepción generalizada de que tramitar una Visa a Canadá parece ser algo relativamente fácil, quizá debido a la permanente invitación de ese país a nuevos migrantes, la realidad es que es un trabajo largo y meticuloso en el que tuve la suerte de encontrar asesoramiento de una persona confiable y entendida en la materia.
El Dr. Ronald Ovidio Jiménez Roca, además de proporcionarnos todas las herramientas necesarias durante el proceso de aplicación de Visa de Estudiante de mi Hija, nos ofreció, con su calidad humana y conocimiento en el tema, un sentimiento de tranquilidad y seguridad sobre lo que hacíamos, muy distante al sentimiento que en reiteradas ocasiones me habían brindado el “Internet y la Tecnología”, que a través de respuestas frías generadas por “bots”, solo te permiten consultar lo que ellos están programados para contestar.
En consecuencia, además de agradecer su estrecha colaboración, muy sinceramente me permito felicitarlo por su excelente labor y al mismo tiempo, exhortar a quienes han pasado experiencias como la mía, o que simplemente quieran tener una experiencia amigable y profesional en el proceso de tramitar una Visa a Canadá, hagan uso de sus excelentes servicios profesionales.
Atte.
Haendel Abasto Casanovas
UN PADRE AGRADECIDO